El reciclaje de oro y otros materiales ayuda a
no malgastar más recursos naturales del planeta.
Con nuestras acciones de reciclaje, conseguimos
reducir la explotación minera de materiales preciosos, contribuyendo a
preservar el equilibio del planeta.
Podemos evitar daños irreversibles, como la contaminación
masiva de agua:
"Con la extracción minera de 1 sólo gramo de oro
o plata se contaminan 2 toneladas de agua potable".